Cuarto mensaje de la serie: La clave secreta.

Si supieras la clave secreta para todo en la vida:

a. ¿La usarías de inmediato?

b. ¿La compartirías con otros?

c. ¿La harías desaparecer?

d. ¿La venderías en el mercado negro?

e. ¿A y B?

Pablo encontró la clave secreta para todo en la vida. Sí, como lo lees. ¡Para todo! Y si nos acompañas en esta serie, juntos la aprenderemos en este estudio de la carta a los Filipenses. Una carta de ánimo y esperanza escrita desde uno de los lugares más depresivos del mundo: una cárcel romana del siglo I.

Tercer mensaje de la serie: La clave secreta.

Si supieras la clave secreta para todo en la vida:

a. ¿La usarías de inmediato?

b. ¿La compartirías con otros?

c. ¿La harías desaparecer?

d. ¿La venderías en el mercado negro?

e. ¿A y B?

Pablo encontró la clave secreta para todo en la vida. Sí, como lo lees. ¡Para todo! Y si nos acompañas en esta serie, juntos la aprenderemos en este estudio de la carta a los Filipenses. Una carta de ánimo y esperanza escrita desde uno de los lugares más depresivos del mundo: una cárcel romana del siglo I.

Segundo mensaje de la serie: La clave secreta.

Si supieras la clave secreta para todo en la vida:

a. ¿La usarías de inmediato?

b. ¿La compartirías con otros?

c. ¿La harías desaparecer?

d. ¿La venderías en el mercado negro?

e. ¿A y B?

Pablo encontró la clave secreta para todo en la vida. Sí, como lo lees. ¡Para todo! Y si nos acompañas en esta serie, juntos la aprenderemos en este estudio de la carta a los Filipenses. Una carta de ánimo y esperanza escrita desde uno de los lugares más depresivos del mundo: una cárcel romana.

Primer mensaje de la serie: La clave secreta.

Si supieras la clave secreta para todo en la vida:

a. ¿La usarías de inmediato?

b. ¿La compartirías con otros?

c. ¿La harías desaparecer?

d. ¿La venderías en el mercado negro?

e. ¿A y B?

Pablo encontró la clave secreta para todo en la vida. Sí, como lo lees. ¡Para todo! Y si nos acompañas en esta serie, juntos la aprenderemos en este estudio de la carta a los Filipenses. Una carta de ánimo y esperanza escrita desde uno de los lugares más depresivos del mundo: una cárcel romana.

Tercer mensaje de la serie: Dios primero.

Queremos comenzar con el pie correcto, pero no tenemos el enfoque correcto. Nos planteamos una serie de metas, un cúmulo de cosas por hacer y otras tantas por dejar de hacer. Terminamos agotados y abandonamos todos nuestros objetivos más pronto de lo que imaginamos. Que tal si en lugar de apuntar a cosas que queremos lograr, más bien nos enfocamos en quién queremos llegar a ser.

¿Qué dirías si te digo que la clave para lograr eso es poner a Dios primero?

Segundo mensaje de la serie: Dios primero.

Queremos comenzar con el pie correcto, pero no tenemos el enfoque correcto. Nos planteamos una serie de metas, un cúmulo de cosas por hacer y otras tantas por dejar de hacer. Terminamos agotados y abandonamos todos nuestros objetivos más pronto de lo que imaginamos. Que tal si en lugar de apuntar a cosas que queremos lograr, más bien nos enfocamos en quién queremos llegar a ser.

¿Qué dirías si te digo que la clave para lograr eso es poner a Dios primero?

Primer mensaje de la serie: Dios primero.

Queremos comenzar con el pie correcto, pero no tenemos el enfoque correcto. Nos planteamos una serie de metas, un cúmulo de cosas por hacer y otras tantas por dejar de hacer. Terminamos agotados y abandonamos todos nuestros objetivos más pronto de lo que imaginamos. Que tal si en lugar de apuntar a cosas que queremos lograr, más bien nos enfocamos en quién queremos llegar a ser.

¿Qué dirías si te digo que la clave para lograr eso es poner a Dios primero?

Sexto mensaje de la serie: Campeones

Cada 4 años el mundo entero se mueve al ritmo del fútbol. A unos puede no gustarles, a otros les encanta, pero a nadie le es indiferente. ¿Qué tiene esto en común con la iglesia y con una serie de prédicas?

100% Bíblica, pero 100% futbolera, ¿se puede? Una serie absolutamente diferente a todo lo que hayas visto antes… tan genial, que en pleno mes mundialero, vas a preferir venir a la iglesia.

Quinto mensaje de la serie: Campeones

Cada 4 años el mundo entero se mueve al ritmo del fútbol. A unos puede no gustarles, a otros les encanta, pero a nadie le es indiferente. ¿Qué tiene esto en común con la iglesia y con una serie de prédicas?

100% Bíblica, pero 100% futbolera, ¿se puede? Una serie absolutamente diferente a todo lo que hayas visto antes… tan genial, que en pleno mes mundialero, vas a preferir venir a la iglesia.

Cuarto mensaje de la serie: Campeones

Cada 4 años el mundo entero se mueve al ritmo del fútbol. A unos puede no gustarles, a otros les encanta, pero a nadie le es indiferente. ¿Qué tiene esto en común con la iglesia y con una serie de prédicas?

100% Bíblica, pero 100% futbolera, ¿se puede? Una serie absolutamente diferente a todo lo que hayas visto antes… tan genial, que en pleno mes mundialero, vas a preferir venir a la iglesia.